Como dijimos, el suelo pélvico es la zona musculo-esquelética que alberga y sostiene las vísceras del aparato reproductor y urinario. Su correcto funcionamiento influye en muchas áreas de la salud de la mujer y del hombre!
Veamos cuáles son las disfunciones más importantes que pueden darse en esta área del cuerpo…
- Incontinencia de orina. Se define como la perdida involuntaria de orina. Existen dos tipos principales:
- Incontinencia de urgencia: necesidad constante y urgente de orinar. Esta situación es parecida a la que se da cuando tenemos una infección de orina. Vamos al baño muchas veces al día y orinamos muy poquito, la diferencia está en que en la incontinencia de urgencia no hay ninguna infección. En muchas ocasiones no hay una fuga de orina como tal.
La razón principal de esta disfunción es que existe una hiperactividad en la vejiga, es decir que el músculo que recubre la vejiga envía ordenes al cerebro para ir a orinar cuando no hay un volumen suficiente. - Incontinencia de esfuerzo: pérdida o ganas de orinar al hacer esfuerzos (toser, estornudar, reir, coger un peso, saltar, correr…). Esto es debido a un debilitamiento de la musculatura del suelo pélvico y/o el esfínter de la uretra; por lo que cuando hay un aumento de presión en la vejiga, la musculatura del suelo pélvico no puede soportar la presión y se escapa la orina.
La buena noticia es que todo esto se puede tratar y se obtienen unos excelentes resultados!
Gracias a la información y la aplicación de nuevas técnicas en la fisioterapia, contamos con las mejores herramientas para trabajar este tipo de disfunciones como son la diatermia, electroestimulación, biofeedback, ejercicio terapéutico y cómo no… ¡nuestras manos!
- Dolor pélvico y/o lumbar: Existen muchos tipos de dolor en la esfera pélvica. Los más comunes son:
- Dolor en las relaciones sexuales: es un tema muy habitual aunque no se hable mucho de ello.
En la mujer puede ser debido a alguna lesión en el suelo pelvico o la vagina como la cicatriz de una episiotomía o una simple contractura. En el hombre también se dan casos de dolor y es necesario consultar. - Dolor menstrual: muy común en mujeres en edad fértil y un problema siempre oculto aunque cada vez menos.
- Dolor lumbo-sacro: La zona lumbo-sacra está intimamente unida con el suelo pelvico y el abdomen por lo que trabajan en conjunto.
- Embarazo, parto y postparto. El embarazo no es una enfermedad, es un estado fisiológico caracterizado por una “metamorfosis” espectacular del cuerpo en la que la mujer experimenta una serie de cambios físicos, emocionales y hormonales en un periodo corto de tiempo.
Durante el embarazo suelen darse problemas como dolor lumbar, ciática, dolor en las ingles, sobretodo dados por el cambio de postura tan rápido que se produce. La fisioterapia durante el embarazo es una herramienta genial para solucionar estos problemas además de tener un papel importantísimo en la prevención de lesiones en el parto. El masaje perineal, el fortalecimiento del suelo pélvico y abdomen, la actividad física personalizada y una preparación al parto optima es el cóctel perfecto para disminuir las posibilidades de sufrimiento fetal y materno.
Las lesiones más comunes durante el parto son: desgarro perineal, episiotomía, cicatriz de cesárea, lesiones en el pubis, lesiones en coccix, diastasis abdominal (embarazo) Un trabajo manual y educacional previo al parto ayudan a abrir el abanico de posibilidades para así obtener un parto respetado y con la menor instrumentalización posible, y en eso somos especialistas! - Deporte. Los deportes que aporten alto impacto abdominal son un factor de riesgo para sufrir una disfunción en el suelo pélvico. Algunos de estos deportes son: running, tenis, halterofilia, baloncesto, y todas aquellas disciplinas en las que el suelo pélvico recibe un aumento de presión.
Si esta presión no es bien gestionada, o bien el deporte se practica en alto rendimiento, la/el deportista puede sufrir una lesión o disfunción en esta área del cuerpo. La más habitual es la incontinencia de esfuerzo, que como hemos comentado anteriormente se produce por la debilidad de los músculos del suelo pélvico ante un aumento de presión en el abdomen.
Otra lesión muy común sobretodo en ciclistas es el atrapamiento del nervio pudendo debido a la presión de la zona perineal con el sillín de la bicicleta de forma mantenida.
Desde la Fisioterapia del suelo pélvico nos encargamos de la prevención de estas lesiones a través de la educación y el ejercicio terapéutico, además de tratar dicha lesión cuando ya se ha instaurado con herramientas como la terapia manual, electroestimulación, diatermia y punción seca.